Las Estrenas - Nebraska (Alexander Payne, 2013)

Nebraska, la última película de Alexander Payne, posee dos componentes fundamentales: la historia familiar -agridulce y de reconciliación y reconocimiento paterno-filial- y el paisaje que la envuelve, a lo largo del recorrido por la Norte América profunda; poblada de interminables llanuras y pequeños poblados casi desiertos, donde ya nada ni nadie espera.

En ese contexto de desolación se plantea, inicialmente, la historia de Woody (Bruce Dern), un anciano con síntomas evidentes de demencia que piensa que ha sido premiado con 1 millón de dólares. Fundamentalmente, su hijo David (Will Forte) se convertirá en su fiel aliado para realizar un largo viaje en busca de algo que, efectivamente, no existe de forma material -no hay tal premio y, además, ya no es posible recuperar el pasado- aunque sí de forma simbólica: el trayecto y su conclusión servirán para cumplir una (última) voluntad y, por tanto, para atestiguar la necesidad de cumplir los sueños.