El Movimiento 15 de mayo sigue evolucionando y expandiéndose para que no se diluyan las ganas de luchar por una sociedad más justa y equitativa, y prueba de ello son acciones como la Marcha popular indignada que el pasado 20 de junio se inició, desde diferentes puntos geográficos de España, hacia Madrid. En el camino se pretende reforzar la necesidad del diálogo y la colaboración entre las asambleas de barrios, pueblos y ciudades para que las ideas que propugnan un cambio de sistema sigan vigentes, y cada vez la sociedad transforme su indignación en pruebas que demuestren que una auténtica sociedad de bienestar no debe someterse a los intereses y las estimaciones económicas, sino que debe ser más libre, más transparente y debe repartir su riqueza a partes iguales. La igualdad de posibilidades debe ser efectiva; no puede estar fijada por un determinado precio.
En Café con Vistas tuvimos la ocasión de conversar telefónicamente con Guzmán, una de las personas que están emprendiendo la marcha desde València, que prevé alcanzar su destino hacia finales del mes de julio.
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